JESÚS EN LA CRUZ - Haga click aquí para descargar
Biografía de Doyle Davidson:
Doyle Davidson nació en una granja cerca de Sarcoxie, Missouri, en 1932. Él sirvió como miembro médico de un hospital de la Marina de los Estados Unidos durante la guerra de Corea, pasando 27 meses en Yokosuka, Japón. Después regresó a los Estados donde fue admitido por la Universidad de Missouri en la Facultad de Medicina Veterinaria en 1958. Justo antes de entrar a la Facultad de Veterinaria, Dios lo visitó y le dijo: «Yo no quiero que seas veterinario, quiero que seas ministro del evangelio». Él no obedeció a Dios ese día y continuó con sus planes y recibió un doctorado en Medicina Veterinaria. Él se mudó al norte de Texas y estableció con éxito la práctica veterinaria equina.
En 1968 Dios se movió en la vida de Doyle y por dos años, la presencia del Señor lo acompañó en su coche preguntándole cuándo iba a predicar el evangelio. El Señor lo dirigió en 1969 a vender su hospital y él lo obedeció. El 2 de enero de 1970, la venta fue finalizada y él se alejó, sin saber a dónde iba a ir. Aunque había nacido de nuevo cuando era un niño pequeño, Jesús vino a ser Señor de su vida ese día y él fue bautizado posteriormente en el Espíritu Santo y en agua. Dios lo mandó a Israel en 1974, ungiéndolo para predicar el evangelio en la Tumba del jardín el 16 de junio con el pasaje de Hechos 1:8 ardiendo en su corazón. En 1980, Dios instruyó a Doyle para que hablara a la gente de Plano, Texas. Él estableció el ministerio de Water of Life (Agua de Vida) y en 1982 terminó con su práctica veterinaria.
Doyle es llamado como un siervo y apóstol del Señor Jesucristo. En 2017 el Señor le dijo: «Te he elegido y enviado a las cuatro esquinas de la tierra para que lleves mi palabra sin desesperación o miedo».
INTRODUCCIÓN
En noviembre de 1988, recibí un
pedido de un pastor en África por algunos de nuestros casetes. Dios me
dirigió que le mandara diez casetes de enseñanza y así lo hice. Recibimos
ocho pedidos más de casetes en noviembre y diciembre de 1988 y luego nos
pidieron 6000 en 1989.
Para junio de 1990, habíamos enviado más de 88,000 horas en casetes de
enseñanza y alabanza a 9,000 personas en los Estados Unidos de América y a
18 países extranjeros.
En agosto de 1989, Dios me dirigió poner a
disposición en casetes las enseñanzas que Él me ha dado “El Evangelio y sus
Beneficios” y “La Sangre de Jesús”. Desde agosto de 1989, hemos enviado,
gratis bajo petición, un casete cada mes durante 20 meses, empezando con el
primer casete de la serie: “Él Resucitó”.
Dios ahora me ha dirigido
en poner las enseñanzas de “El Evangelio y sus Beneficios” y “La Sangre de
Jesús” en libro y distribuirlos otra vez, gratis bajo petición.
En 1
Corintios 9:9-18, el apóstol Pablo dice:
9 En la ley de Moisés
está escrito: «No pondrás bozal al buey que trilla.» ¿Se preocupa Dios por
los bueyes
10 o lo dice enteramente por nosotros? Sí, por nosotros
se escribió esto, porque con esperanza debe arar el que ara y el que trilla,
con esperanza de recibir del fruto.
11 Si nosotros sembramos entre
vosotros lo espiritual, ¿será mucho pedir que cosechemos de vosotros lo
material?
12 Si otros participan de este derecho sobre vosotros,
¿cuánto más nosotros?
Sin embargo, no hemos usado de este derecho, sino
que lo soportamos todo por no poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo.
13 ¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del
Templo, y que los que sirven al altar, del altar participan?
14 Así
también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del
evangelio.
15 Pero yo de nada de esto me he aprovechado, ni tampoco
he escrito esto para que se haga así conmigo, porque prefiero morir, antes
que nadie me prive de esta mi gloria.
16 Si anuncio el evangelio, no
tengo por qué gloriarme, porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no
anunciara el evangelio!
17 Por eso, si lo hago de buena voluntad,
recompensa tendré; pero si de mala voluntad, la comisión me ha sido
encomendada.
18 ¿Cuál, pues, es mi recompensa? Que, predicando el
evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no abusar de
mi derecho en el evangelio.
Esto es lo que Dios me ha instruido
hacer, dar el evangelio de Cristo gratis.
Dios me ha revelado estas
enseñanzas en lo últimos 20 años. Si tienes oídos para oír, deja a un lado
tu orgullo religioso, tu tradición religiosa, tu tradición de hombre, tu
denominación, tu teología y tu enseñanza de la escuela bíblica. 1 Corintios
8:1 nos dice que el conocimiento te envanece, pero el amor edifica. Es 2
Juan 1:6 declara: “6 Y éste es el amor: que andemos según sus mandamientos”.
Y Juan 14:23 declara: “El que me ama, mi palabra guardará”.
Si tú
amas a Dios, tú guardarás sus palabras, si tú guardas sus palabras, tú
guardas su comisión y si tú guardas su comisión, tú predicarás el evangelio.
Si tú predicas el evangelio, Dios te enviará y si Dios te envía, será porque
tú estás predicando el evangelio.
Si tú predicas el evangelio, es el
poder de Dios para la salvación a cualquier que crea, a los judíos
primeramente y también a los griegos. Como Romanos 1:17 dice: “Pues en el
evangelio, la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está
escrito: «Mas el justo por (Su) fe vivirá»”. (cita en Habacuc 2:4).
CAPÍTULO 1
JESÚS MURIÓ POR TI
Jesús murió en la
cruz. Él murió en cuerpo, alma y Espíritu. Él murió por ti, por mí y por
todo el mundo. Él murió, Él fue enterrado y Él resucitó al tercer día. Ese
es el evangelio. Ese es el poder de Dios para la salvación de todos los que
crean.
Jesús es nuestro ejemplo. Por lo tanto, es importante que tú y
yo entendamos como Él se comportó en la tierra y en la cruz. Tú y yo también
debemos entender que una vez que recibimos a Jesús, tenemos Su Espíritu y
que nosotros podemos caminar como Él caminó.
Jesús Murió en Cuerpo,
Alma y Espíritu
Ve a Isaías 53:8-9. Esta es una profecía dada por el
profeta Isaías de como el Espíritu Santo le dio las palabras, unos 700-750
años antes de que Jesús viniera a la tierra:
8 Por medio de violencia
y de juicio fue quitado; y su generación, ¿quién la contará? Porque fue
arrancado de la tierra de los vivientes, y por la rebelión de mi pueblo fue
herido.
9 Se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos
fue en su muerte. Aunque nunca hizo maldad ni hubo engaño en su boca,
La palabra “muerte” en el verso 9 en realidad es en plural del hebreo
“muertes”. Yo creo que a través de estudiar las escrituras y de las
lecciones que Dios me ha enseñado, que Jesús murió tres muertes: física, del
alma y espiritual.
En Su muerte física, Su cuerpo murió y fue enterrado o
puesto en una tumba. En la muerte de Su alma, Su alma se convirtió en una
ofrenda por el pecado para ti y para mí. Finalmente, en Su muerte
espiritual, Su Espíritu fue separado de Dios.
Jesús Fue un Hombre
Jesús fue un hombre cuando estuvo en la tierra. Él fue Dios, pero se
despojó de Su autoridad Divina y se convirtió en un hombre como tú y yo.
En Hebreos 2:14 nos dice que Él tenía la misma carne y sangre como
nosotros. En Romanos 8:3 dice que Él fue enviado a semejanza de carne de
pecado. En Filipenses 2:7 dice que Él fue hecho semejante a los hombres. Él
se identifica con la raza humana en todos los sentidos.
Jesús caminó
como un hombre en la tierra. Cuando Él tenía como 30 años de edad, fue
bautizado en el Espíritu Santo. Después de Su bautismo en el Espíritu Santo,
Jesús empezó a caminar en el poder del Espíritu de Dios.
Estudia Como
Jesús Vivió
Es importante que tú y yo sepamos como Jesús vivió en la
tierra, porque Él es nuestro ejemplo. 1 Juan 2:6 dice:
6 El que dice
que permanece en él, debe andar como él anduvo.
Tú y yo debemos
caminar como Jesús caminó. Entiende esto: nosotros no obedeceremos a Dios de
la manera en que Jesús lo hizo, obedeciendo la letra de la Biblia. En vez de
eso, nos guiaremos por el Espíritu para obedecer a Dios a medida que
vallamos recibiendo revelación de como Jesús caminó en la tierra.
Tú
y yo no vamos a morir y seremos resucitados de entre los muertos, pero
seremos confrontados por espíritus malignos, como a Jesús le pasó antes de
que Él muriera en la cruz. Necesitamos aprender y recibir revelación de como
Él caminó en la tierra. Y una de las más importantes lecciones que
necesitamos aprender es que tenemos Su Espíritu.
Tú tienes Su
Espíritu; no te olvides de eso. 1 Corintios 6:17 dice
17 Pero el que
se une al Señor, un espíritu es con él.
Nosotros recibimos el
Espíritu del Señor Jesucristo cuando nosotros lo recibimos a Él. Podemos ver
como Él se comportó en la tierra y en la cruz, y porque tenemos su Espíritu
en nosotros, debemos confiar en caminar como Jesús caminó.
Su
Espíritu Nunca Fracasó
Una noche en 1986, yo estaba caminando en el
campo, donde camino, corro y oro. Estaba meditando y hablando con Dios
acerca de algunas acciones que Él estaba requiriendo de mí. Estaba
preocupado con lo que Dios me estaba diciendo que hiciera. No podía creer
que era de Dios.
El Padre me dijo: “Ese Espíritu en ti ha sido
probado en todas las formas que pueda ser probado y nunca ha fracasado”. Él
estaba hablando acerca del Espíritu de Su Hijo. “Ese Espíritu ha sido
probado en todas las formas que pueda ser tratado y nunca ha fracasado”. Eso
construyó una confianza en mi espíritu.
Eso fue una palabra de
profecía para mi corazón. Edificó mi espíritu. Desde ese día, no he tenido
miedo de que mi espíritu fracase, porque es el Espíritu de Cristo en mí. Si
una persona quiere seguir a Dios, no hay absolutamente alguna razón por la
que una persona caiga en algún tipo de pecado.
Puedes estar al borde
del pecado y no pecar. ¿Sabes por qué? Jesús fue tentado. Jesús fue tentado
con toda clase de pecado y Él nunca pecó. ¿Sabías que no es pecado si llegas
a ser tentado? Es pecado pecar.
La gente religiosa me asombra. Ellos
piensan que si tú te acercas a nueve yardas (8.22 metros) de pecar, tú
pecas. Sin embargo, ellos pecan todo el tiempo. Ellos pecan porque dudan.
Romanos 14:23 dice:
23 …y todo lo que no proviene de fe, es
pecado.
1 Juan 3:4 dice:
4 …pues el pecado es infracción de la
Ley.
El pecado es duba. Si tú dudas, tú pecas. Es tan simple como
eso. Pero tenemos el Espíritu de Cristo y podemos ver como Él vivió y como
Él se comportó en la tierra y en la cruz. Su Espíritu nunca fracasó. Y
nuestro espíritu tampoco tiene que fracasar.
He estado en algunas
situaciones muy precarias. Yo caminé justo a través de ellas sin cometer
pecado. Hubo toda oportunidad de pecar. Sin embargo, no pequé por el
Espíritu que está en mí.
No confío en mí mismo. Debes de saber que no
confió en mí mismo, porque si lo hago, voy a fracasar. Tú también lo harías.
Pero yo conozco el Espíritu en mí.
Sé cómo Dios ha puesto fe dentro de mí
y cómo Él la ha perfeccionado en la medida en que lo ha hecho y cómo Él me
ha hecho caminar en la manera que camino. Puedo ministrar a la gente de
acuerdo con la fe que yo tengo.
Tú Recibiste Su Espíritu
Romanos 8:9 nos dice que, si algún hombre no tiene el Espíritu de Cristo, él
no es de Él. En Gálatas 4:6 dice que Dios ha mandado el Espíritu de Su Hijo
a nuestros corazones. Tú puedes ver en las escrituras que tú recibiste el
Espíritu del Señor Jesucristo. Cuando lo recibiste a Él, tú tienes la
autoridad de convertirte en el hijo de Dios.
Me maravilla lo que se
enseña a la gente en los Estados Unidos de América y supongo que en todo el
mundo. La gente ha sido enseñada que ellos recibieron el Espíritu Santo
cuando ellos aceptaron a Jesús. Bueno, si eso es verdad, ¿Cuándo recibimos a
Jesús?
Tenemos que recibir a Jesús, porque es Él quien salva. Es Su
Espíritu que se juntó con nuestro espíritu y viene a ser un Espíritu. Es Su
Espíritu en nosotros que causa que Cristo viva en nosotros por fe.
No
solamente eso, pero la Palabra y Jesús son lo mismo. Encontramos en la
parábola del sembrador que nosotros sembramos la Palabra. Cuando sembramos
la Palabra, sembramos a Jesús en nuestros corazones. La iglesia está
sumamente confundida acerca de la Biblia.
La Iglesia Está Confundida
En 1985, mientras estaba orando un día, Dios me mostró una torre arriba
en dirección a los cielos. Era una hermosa torre, bien construida, con cada
piedra en el lugar apropiado. Dios me preguntó: “¿Qué es lo que ves?” Yo
dije: “Bueno, es una torre, obviamente”. Entonces Él me dijo que
representaba confusión”.
Él dijo: “Esa es mi iglesia”. Yo le dije:
“Señor, yo no puedo aceptar que tu iglesia está totalmente confundida”. Le
dije que me gustarían una escritura para confirmar y Él dijo: “Lee el libro
de Jonás”.
Así que lo hice y cuando leí el final del libro, el último
verso decía que había más de 120,000 personas viviendo en Nínive que no
sabían discernir entre su mano izquierda y su mano derecha. Dios me
preguntó: “¿Tú crees que eso es confusión?” Yo dije: “Creo que sí”. “Bien,
esa es mi iglesia”.
Jim Bakker y PTL (Programa Cristiano de
Televisión)
Todos en América saben acerca de Jim Bakker, de cómo
recibió una sentencia de más de 40 años de prisión por su participación en
el desastre financiero PTL. Inmediatamente después que Jim Bakker fue
sentenciado, Dios me dijo que la gente en el cuerpo de Cristo que participó
en PTL era partícipe de las malas acciones de Jim Bakker, lo mismo que
cualquier otro pecado.
Mira en 2 Juan 10:11:
10 Si alguno
viene a vosotros y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa ni le
digáis: «¡Bienvenido!»,
11 porque el que le dice: «¡Bienvenido!»
participa en sus malas obras.
La palabra “bienvenido” quiere decir
también “recibimiento con agrado”. La escritura dice que si tú das la
bienvenida a alguien quien tiene la doctrina equivocada, tú eres
participante de sus malas obras. Si tú sabías que PTL estaba mal, si tú
sabías que Jim Bakker estaba en un error y de todos modos participaste en
PTL, entonces fuiste partícipe de las malas obras y tú has pecado.
El
cuerpo de Cristo es culpable con respecto a estos asuntos y es porque los
profetas y otros ministerios de los Estados Unidos no obedecieron las
escrituras.
Mateo 18:15-17 dice que si una persona peca contra ti, ve
estando tú y él solo. Si no te oye, toma uno o dos testigos contigo. Si los
oye bien. Si no los oye a ellos, dilo a la iglesia.
El cuerpo de
Cristo debería de haber tomado una posición en este asunto. Si la iglesia
hubiera obedecido las escrituras Jim Bakker podría no haber ido a la cárcel.
Le he estado preguntando a Dios por qué Él no dirigió a Jim Bakker al
arrepentimiento. Todavía no tengo una respuesta, pero aún sigo preguntando.
Sin embargo, ciertamente, Dios está diciendo que la gente en la iglesia
es culpable por su participación en el PTL.
Si tú diste dinero al PTL
o si tú fuiste partícipe o utilizaste las instalaciones, tú eres culpable.
Además tú necesitas arrepentirte. Fuiste partícipe de sus malas obras. Solo
la gracia de Dios me impidió ser un participante en PTL.
Déjame
decirte algo más: Cuando Jim Bakker estaba en problemas, la iglesia de
Jesucristo lo abandonó. Ellos no se quedaron con él como un hermano. Cuando
Lot fue secuestrado en Sodoma y Gomorra, Abraham tomó a sus sirvientes
entrenados y lo rescataron. La iglesia, sin embargo, abandonó y entregó a
los tribunales a Jim Bakker.
Abraham Fue Bendecido
Abraham
mató a los reyes que se habían llevado en cautividad a Lot. Génesis 14:17
dice que ellos fueron derrotados. Después que Abraham regresó, Melquisedec,
el sacerdote del Dios Altísimo, lo bendijo y dijo:
19 y lo bendijo,
diciendo: «Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de
la tierra;
20 y bendito sea el Dios Altísimo, que entregó a tus
enemigos en tus manos.» Y le dio Abram los diezmos de todo.
Dios
bendijo a Abraham, a pesar de que Abraham había matado a sus enemigos. De
acuerdo al verso 20, Dios entregó a los enemigos de Abraham en sus manos.
Los cristianos que predican a un Dios débil no entienden quién es el Dios de
Abraham, Isaac y Jacobo. Ellos no conocen el Espíritu de Cristo que está en
nosotros cuando lo recibimos a Él.
CAPÍTULO 2
JESÚS
FUE TRAICIONADO
Continuemos viendo como Jesús se condujo en la tierra
y en la cruz. El comportamiento de Jesús en la tierra y en la cruz es
importante, porque tú y yo tenemos Su Espíritu. Tenemos Su Espíritu en
nosotros, recuerda: “Él que se une con el Señor es un espíritu”. Si tenemos
el Espíritu en nosotros, entonces podemos de seguro obedecer a Dios como
Jesús lo hizo.
Vamos a Lucas 22:47-53 y tú verás la fortaleza del
Espíritu de Jesús:
47 Mientras él aún hablaba, se presentó una turba.
El que se llamaba Judas, uno de los doce, que iba al frente de ellos, se
acercó hasta Jesús para besarlo.
48 Entonces Jesús le dijo: —Judas,
¿con un beso entregas al Hijo del hombre?
49 Cuando los que estaban
con él se dieron cuenta de lo que había de acontecer, le dijeron: —Señor,
¿heriremos a espada?
50 Entonces uno de ellos hirió a un siervo del
Sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha.
51 Entonces, respondiendo
Jesús, dijo: —Basta ya; dejad. Y tocando su oreja, lo sanó.
¿Podrías
tú sanar la oreja de la persona que ha venido a arrestarte?
52
Entonces Jesús dijo a los principales sacerdotes, a los jefes de la guardia
del Templo y a los ancianos que habían venido contra él: —¿Como contra un
ladrón habéis salido con espadas y palos?
53 Habiendo estado con
vosotros cada día en el Templo, no extendisteis las manos contra mí; pero
ésta es vuestra hora y la potestad de las tinieblas.
Jesús fue
traicionado por Judas, uno de Sus asociados más cercanos, uno de los doce
discípulos. Jesús escogió a Judas en obediencia al Padre. Judas lo traicionó
con un beso. ¿Cómo te sentirías si alguien a quien tú ungiste para echar
fuera demonios, resucitar a los muertos, limpiar a los leprosos y sanar a
los enfermos, te besara como señal de que tú eres el que deben llevarse?
Jesús no se ofendió cuando Judas lo traicionó. Tú tienes el mismo
Espíritu en ti. En algún momento, tú serás traicionado. Bien podrías estar
también listo para eso. Sin embargo, si tú caminas en el Espíritu de Cristo,
en amor y obedeces a Jesús, la traición no te va a dañar, porque Él ya ha
sido traicionado y no lo dañó.
El único modo en que el demonio puede
dañarte es a través de tu alma. Él no puede dañar tú espíritu. El Espíritu
de Cristo que está en ti ha sido tratado y probado en todos los sentidos. Si
caminas en ese Espíritu, oras en lenguas, lees la Palabra en voz alta,
ayunas y obedeces a Dios, tu espíritu no será dañado. Y debes saber esto,
para caminar en el Espíritu, tendrás que caminar por fe.
Limpia
Tú Espíritu de Inmundicia
Si tú no caminas en Su Espíritu, tu
espíritu será ofendido. 2 Corintios 7:1 nos dice que nuestro espíritu puede
ser contaminado:
1…limpiémonos de toda contaminación de carne y de
espíritu,
Tú puedes abrir tu espíritu a toda contaminación y dejar
que cualquier cosa entre en ti.
1 Corintios 14:32 dice que los
espíritus de los profetas están sujetos a los profetas. El espíritu del
hombre está sujeto al hombre. Jesús dentro de ti, el Espíritu de Cristo en
ti, no va operar en ti a menos que controles tu espíritu.
Tienes que
caminar con humildad. Si tú caminas en orgullo, cualquier cosa le puede
pasar a tu espíritu, aunque hayas recibido a Jesús. Tú espíritu puede ser
oprimido y puede ser contaminado.
La gente religiosa me maravilla.
Ellos dicen que el espíritu es como un carro nuevo, solo lo de afuera puede
ensuciarse. Ellos harán cualquier cosa para proteger sus enseñanzas
doctrinales.
Santiago 3:14 dice que puedes tener celos amargos y
rivalidad en tu corazón. Sin embargo, si caminas en humildad, cuando seas
traicionado, la traición no te tocará.
La gente religiosa dice: “¿Por
qué Dios me dejaría ser traicionado? Yo soy el Señor Importante”. Déjame
decirte, nunca pienses que tú eres importante para Dios, que Él no pueda
hacer algo sin ti. Él estaba muy bien antes de tenernos.
CAPÍTULO 3
DISTINCIÓN (ACEPCIÓN) DE PERSONAS
Si el Espíritu
Santo te está convenciendo de pecado después del último capítulo, déjame
decirte algo más: Cualquiera que haga distinción de personas comete pecado.
Ve a Santiago 2:9:
9 pero si hacéis acepción (distinción) de
personas, cometéis pecado y quedáis convictos por la Ley como transgresores,
Si haces distinción (aceptación) de personas, cometes pecado y tú
trasgrede la ley.
Presión en el Espíritu
Aquí hay una
historia que tal vez te ayude. En 1987, mi padre estaba programado para
someterse a una cirugía en Missouri, donde él vive. Los doctores iban a usar
una técnica de globo para despejar algo del bloqueo en sus arterias
coronarias.
Sabía en mi espíritu que la operación no era seria, sin
embargo, tenía una enorme presión en mi espíritu para ir a Missouri. Mi
padre estaba cerca de los 80 años de edad y los doctores le habían dicho que
tal vez él podría morir durante el procedimiento.
Los espíritus en
los doctores y en mi familia trataron de asustarme para ir a Missouri. El
Padre de espíritus, el número Uno en el cielo quien dirige mis pasos, dijo
que me quedara en Texas. Le dije a mi familia: “Cuando Dios me diga ve, iré
allá”.
Cuando estaban haciendo pruebas en su corazón, los doctores
descubrieron un tumor en el riñón de mi padre y dijeron que tenían que
quitar el riñón con cirugía. Dios me dijo: “Ve” y fui.
Un amigo
cercano, un hombre que consideró un hermano en el Señor y no consideró a
todos quienes se llaman a sí mismos hermanos; se ofreció a llevarme en su
avión a Missouri y decidimos que era la voluntad de Dios que él lo hiciera
así.
Salimos de McKinney, Texas, volando hacia el norte y para cuando
cruzamos el Río Rojo, nos encontramos con una serie de tormentas. Yo no soy
piloto, pero he estado en muchos aviones y no había visto algo así antes.
Las tormentas eléctricas se formaban frente a nosotros. Tratamos de ir
por encima y alrededor de ellas, pero cada vez que íbamos por una abertura
en las nubes, otra tormenta se formaba frente a nosotros.
Llegarás A
Donde Eres Enviado
Después de 30 minutos, empecé a orar. Sabía que
había estado resistiendo espíritus malignos y obedeciendo a Dios al no ir a
Missouri antes, pero también sabía que Dios me había enviado cuando
finalmente fui.
Mientras estaba sentado ahí, Dios me dijo: “¿Te he
mandado a algún lado al que no hayas llegado? Yo dije: “No Señor”, entonces
me relajé y miré a mi amigo tratando de volar alrededor de esas nubes
Un momento después, Dios dijo: “Él tendrá que ir por debajo de esas
tormentas para pasarlas”. Me senté en silencio, porque yo no estaba volando
el avión y tengo el suficiente sentido común para estar callado cuando
alguien está operando algo de lo que no sé.
Después de 15-20 minutos,
mi amigo me miró y dijo: “Yo creo que tengo que ir por debajo de las nubes”.
Yo dije: “Tienes el pensamiento de Dios, porque eso fue lo que me dijo hace
15 minutos”.
Fuimos por debajo de las nubes, encontramos un poco más
claro para volar y nos dirigimos al norte. En el proceso de evitar las
tormentas, nos desviamos mucho hacia el este y no nos dimos cuenta. Llegamos
a una ciudad y miramos. Vi la carretera y un río y pensé que era la ciudad
de Tulsa.
Volamos por encima de la carretera unos minutos, pero no
reconocí ninguno de las ciudades debajo de nosotros. Eso era muy extraño
para mí, porque conozco esa carretera como la palma de mi mano.
Mi
amigo vio el mapa y dijo: “Estas ciudades no están a la derecha de la
carretera”. Yo dije: “Esta no es la carretera correcta”. Resultó que la
ciudad en la que volamos era Fort Smith de Arkansas en vez de la ciudad de
Tulsa de Oklahoma.
Sin Gasolina
Después nos dimos cuenta que,
el avión se quedó sin combustible. En el proceso de evitar las tormentas, mi
amigo olvidó cambiar los tanques de combustible. Volamos sin problemas y de
repente el avión se sacudió una vez y murió. Esa fue la primera vez que yo
había estado en un avión que comenzó a caerse.
Mi amigo me dio el
micrófono y dijo: “Toma esto”. Yo no sabía lo que él estaba preparando para
hacer, pero yo sabía que iba a buscar un campo para ayudarle a descender el
avión, porque yo sabía que Dios había dicho que iba a llegar a donde Él me
envió.
No tenía miedo. No tenía miedo en absoluto, ya sea que lo
crean o no. Pensé que lo peor que tendríamos que hacer era estar detenidos
un poco de tiempo en uno de los campos debajo de nosotros, porque el motor
no estaba funcionando y sabía que el avión no iba a estar en el aire por
mucho tiempo.
Lo que sea que hizo mi amigo, logró que el motor
arrancara después de dos o tres intentos. El motor arrancaba y el avión se
levantaba un poco, después el motor moría, arrancaba, se levantaba y moría.
Como en el tercer intento, el motor empezó a arrancar. Una vez que nos
establecimos, le pregunté: “¿Qué pasó? Él dijo que se le había olvidado
cambiar el interruptor del tanque de combustible. Entonces aterrizamos y
descubrimos donde estábamos.
Volamos hasta Missouri sin ningún otro
problema, pero no pude entender toda la confusión por la que habíamos
pasado. Acudí a la cirugía de mi papá, la cual estuvo bien y un el día
después de la cirugía, mi amigo y otro piloto regresaron por mí.
Aterrizando en la Ciudad de McKinney, Texas
Ellos volaron desde
McKinney y me iban a recoger en una pequeña pista de aterrizaje cerca de la
casa de mi hermana, donde crecí. Habría sido muy conveniente. Sin embargo,
el clima los paró, ellos tuvieron que aterrizar como 60-70 millas (97-113
kilómetros) de distancia.
Ellos rentaron un carro y fueron a
recogerme. Manejamos al aeropuerto, abordamos el avión y regresamos a
McKinney.
El vuelo de regreso fue totalmente por instrumentos. La
mayor parte del tiempo, sólo podíamos ver nubes.
Yo estaba sentado en
el avión orando y el piloto se comunicó por radio para recibir instrucciones
sobre cómo aterrizar en McKinney. El controlador de tráfico aéreo le dijo
que la nube que cubría era muy densa para que aterrizáramos en McKnney y que
tendríamos que descender en Addison de Texas.
Seguí orando mientras
continuamos hacia Addison. Tuvimos que volar encima de McKinney, en el
camino hacia Addison y mientras cruzábamos McKinney las nubes de repente se
abrieron y pudimos ver el sol brillando a través de ellas.
El piloto
dijo: “Yo voy a ir por aquí” y aterrizamos en McKinney. En realidad,
necesitábamos aterrizar en McKinney, porque tenía que estar en el servicio
de la iglesia.
No Hay Carga Importante
Estaba perplejo
por qué el viaje había sido de ese modo, por qué había mucha confusión,
aunque cada vez que necesitaba que algo pasara, había sucedido. Empecé a
orar, pero no pude oír alguna respuesta de Dios. De hecho, no oí Su
respuesta hasta después de uno o dos días.
Sin embargo, todo el viaje
fue voluntad de Él, y finalmente me mostró por qué. Al siguiente día, más o
menos, estaba hablando con mi amigo. Estábamos hablando acerca del viaje y
él dijo: “Yo te considero una carga importante”.
Inmediatamente, me
vino Santiago 2:9 y dije: “Eso es pecado”. Considerar a alguien “carga
importante” eso es distinción (acepción) de personas y es pecado.
El
cuerpo de Cristo está lleno de gente que hace distinción (acepción) de las
personas. Ninguna persona es importante para Dios, a menos que él o ella
este obedeciéndole. No hay personas importantes. No hay alguien más alto que
otro. Si obedecemos a Dios, somos importantes para Él. Si no obedecemos a
Dios, cometemos pecado.
La Distinción (Acepción) de Personas nos Hace
Transgresores de la Ley
Dios me enseñó una lección muy valiosa en ese
viaje. Santiago 2:9 dice que distinguir (acepción) a las personas somos
transgrede de la ley. El castigo por transgredir la ley es la muerte. Eso es
aterrador, lo sapas o no.
Tú dices: “Doyle, no estamos bajo la ley”.
Estoy de acuerdo, pero si distinguimos a las personas, nos ponemos bajo la
ley. El Espíritu Santo no te guiará a distinguir personas.
El
problema con la iglesia es que las personas religiosas no pueden leer. Ellos
no quieren leer. Ellos quieren glorificar a alguien en la carne y no
glorificar al Padre de los Cielos.
Es mejor que sepas ahora que si
vas a caminar con Dios, tendrás que dejar tu carne a un lado. Tú no vas a ir
con Dios en la carne, porque Él no irá contigo.
Al Distinguir a las
Personas Cometes Pecado
Tú no quieres hacer distinción (acepción) de
personas. El día que te conviertas en una persona que distingue a otras, ese
día cometes pecado. Y ese día te separas de Dios. Tú eres una presa fácil
para el demonio.
La iglesia no sabe que distinguir a las personas es
pecado. La iglesia piensa que tomar es pecado, que bailar es pecado y fumar
es pecado. La iglesia no sabe que es pecado dar a un hombre el asiento de
enfrente porque está vestido con un traje de $1000.00 dólares y darle el
asiento de atrás, alguien que tiene el cabello largo, unos pantalones de
mezclilla sucios y guaraches. Ellos no saben que eso es pecado.
Pecado es pecado. No importa que pecado sea, el pecado te separa de Dios.
Nunca pienses que yo o alguien es importante para Dios. Yo soy un sirviente
de Dios y eso es lo único importante que tengo.
Si cuando me humillo
y obedezco a Dios y dejo que el Espíritu de Dios fluya a través de mí, eso
es importante, está bien. Pero no pienses que tú eres importante y que Dios
no puede hacer algo sin ti. Él lo hizo sin una gran generación de judíos.
Esto se ha convertido en una lección acerca de humildad, la iglesia
necesita oír esto. Las personas religiosas piensan que son importantes para
Dios. Ellos te lo dirán.
Te lo estoy diciendo, que tú solo eres
importante para Dios si tú crees en Él y lo obedeces y le sirves. Si tú lo
haces, Él te dará honor. Pero si tú lo desobedeces, tú no eres más
importante para Dios que cualquier otro pecador. Tú solamente serás separado
de Él.
CAPÍTULO 4
DIOS DA EL PODER
Vayamos
ahora a Juan 19:10 y te mostraré otro ejemplo de la fortaleza de Jesús y la
insignificancia del hombre.
En Juan 19:10, Pilato dijo a Jesús:
10 —¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para crucificarte
y autoridad para soltarte?
Jesús no le contestó. Me maraville de eso.
Gracias a Dios por la fortaleza en el hombre. Él no le contestó al
gobernador Romano.
Dios me ha mostrado que no tengo que contestar a
cualquier hombre, a menos que Dios me diga. Saber eso es una bendición,
porque las autoridades en los Estados Unidos piensan que te pueden forzar a
hablar. Nadie puede hacerte hablar si Dios no quiere.
Mira en el
verso 10 otra vez:
10 —¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo
autoridad para crucificarte y autoridad para soltarte?
Entonces,
Jesús habló. Jesús solo habló lo que Él oyó decir del Padre. Y en el verso
11, Él dijo:
11 —Ninguna autoridad tendrías contra mí si no te fuera
dada de arriba; por tanto, el que a ti me ha entregado, mayor pecado tiene.
Jesús le dijo a Pilato, el gobernador Romano en Judea: “Tú no tendrías
ninguna autoridad contra mí si no te fuera dada de arriba”.
Nosotros
tenemos el mismo Espíritu que Jesús tenía en Él. Vimos en nuestro libro
anterior: “Jesús Hizo la Voluntad del Padre”, que nosotros tenemos que
caminar como Jesús caminó. Vimos como Él caminó en la tierra y como Él fue
guiado a la cruz.
Nosotros vimos que Él solo hizo lo que Él vio al
Padre hacer y Él solo dijo lo que Él oyó al Padre decir. Él dijo que el
Padre siempre lo oyó mientras Él hablaba. Eso es maravilloso. Podemos tener
la misma confianza, la misma fe.
Pilato fue un gobernador Romano y
Jesús le dijo:
11 —Ninguna autoridad tendrías contra mí si no te
fuera dada de arriba; por tanto, el que a ti me ha entregado, mayor pecado
tiene.
Dios Concede Nuestra Autoridad
Últimamente, oí en los
Estados Unidos a un congresista decir en televisión: “Dios no es el que da
la oportunidad de deducir su dinero cuando se lo da a una organización libre
de impuestos; es el Congreso quien lo hace”. Ese congresista va a aprender
quien es el que le da la autoridad, porque en cualquier momento Dios decide
que no tengamos la deducción, Él la cambiará, aunque tú quieras qué Él lo
haga o no.
Yo vi el orgullo de ese hombre y vi la ceguedad de esta
nación. Un líder religioso conocido nacionalmente sentado junto al
congresista y no le dijo que estaba equivocado.
Me hubiera gustado
haber estado sentado ahí. Yo hubiera dicho: “Un momento, Congresista. El
hombre Jesús acaba de oír lo que dijiste y Él tiene una palabra para ti. En
cualquier momento que no lo aprecies, Él te puede quitar y poner a alguien
en tu lugar quien lo honrará”.
Ellos Recubren con Lodo Suelto
Uno de los principales líderes religiosos en los Estados Unidos se sentó
allí en silencio, porque no quería ofender al congresista o porque no tenía
la palabra de Dios en su boca. Los profetas en este país necesitan oír las
palabras de Dios habladas a Ezequiel en Ezequiel 22:2:
2 «Y tú, hijo
de hombre, ¿no juzgarás tú, no juzgarás tú a la ciudad sanguinaria y le
mostrarás todas sus abominaciones?
Dios instruyó a Ezequiel que
juzgara a Israel, para “mostrarles todas sus abominaciones”, no que se
sentara en silencio para no ofender a alguien.
En Ezequiel 22:27-28,
la palabra del Señor vino a Ezequiel y le dijo que hablara:
27 Sus
jefes en medio de ella son como lobos que arrebatan la presa: derraman
sangre para destruir las vidas, para obtener ganancias injustas.
28
Sus profetas recubrían con lodo suelto, profetizando vanidad y
prediciéndoles mentira, diciendo: ‘Así ha dicho Jehová, el Señor’, y Jehová
no había hablado
“Con lodo suelto” no son las palabras de Dios. “Con
lodo suelto” es vanidad y adivinación de mentiras. Los profetas de América,
los líderes religiosos de este país, han embadurnado con “lodo suelto” a los
“príncipes” en esta tierra (los congresistas, senadores y otros
legisladores).
América Debe Arrepentirse
Los Estados Unidos de
América deben arrepentirse. Tienen que creer en Dios. No hay autoridad en la
tierra a menos que Dios se las de, ni siquiera los del Congreso de los
Estados Unidos. Se escandalizaría algunas personas de esas, al leer Romanos
13:4 y descubrir que ellos son simplemente instrumentos o ministros de Dios
para tú y yo hagamos lo bueno si lo obedecemos.
En Lucas capítulo 11,
Jesús estaba en una cena con uno de los fariseos y Él dijo en el verso 42:
42 Pero ¡ay de vosotros, fariseos!, que diezmáis la menta, la ruda y
toda hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de Dios. Esto os era
necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.
Uno de los abogados
contestó y le dijo:
45 Respondiendo uno de los intérpretes de la Ley,
le dijo: —Maestro, cuando dices esto, también nos ofendes a nosotros.
Este abogado estaba ofendido. Entonces Jesús dijo:
46 Él dijo:
—¡Ay de vosotros también, intérpretes de la Ley! porque cargáis a los
hombres con cargas que no pueden llevar, pero vosotros ni aun con un dedo
las tocáis.
47» ¡Ay de vosotros, que edificáis los sepulcros de los
profetas a quienes mataron vuestros padres!
48 De modo que sois
testigos y consentidores de los hechos de vuestros padres; a la verdad ellos
los mataron, pero vosotros edificáis sus sepulcros.
49» Por eso la
sabiduría de Dios también dijo: “Les enviaré profetas y apóstoles; y de
ellos, a unos matarán y a otros perseguirán”
Dios ha enviado profetas
y apóstoles en América también.
Jesús continuó en el verso 50:
50 para que se demande de esta generación la sangre de todos los
profetas que se ha derramado desde la fundación del mundo
Dios
requiere a los “abogados” de esta generación (los congresistas, senadores y
legisladores) dar cuenta de sus acciones.
Jesús concluyó, en verso
52:
52» ¡Ay de vosotros, intérpretes de la Ley!, porque habéis
quitado la llave de la ciencia; vosotros mismos no entrasteis, y a los que
entraban se lo impedisteis.
Cualquier congresista que diga que el
Congreso tiene la autoridad en hacer las leyes y no Dios ha quitado la llave
del conocimiento.
Dios Reinará en América
Es tiempo de que los
profetas y apóstoles que tienen la palabra de Dios en sus bocas hablen tanto
a los “príncipes” de América como a los profetas, quienes han recubierto con
“lodo suelto” y decirles que Dios requiere cuenta de sus acciones.
Esta nación no está lista para Dios, pero va a estar lista. Esta es la hora
más gloriosa en la historia de la tierra. ¿Podrías imaginar a Dios
corrigiendo cuatro billones de gente en la tierra y gobernar en medio de
ellos?
¿Eso es el poder? Gloria a Dios, eso es poder. Ese es el Dios
de Abraham, Isaac y Jacobo.
Jesús dijo a Pilato, un gobernador
Romano: “Tú no puedes tener alguna autoridad, a menos que se te haya dado de
arriba”. Eso es lo que Él está diciendo a los Estados Unidos ahora.
Simplemente Orar
¿Qué podemos hacer nosotros como cristianos con esta
nación? Algunas veces Dios me dice que hacer y otras veces Él esta callado.
Yo le preguntaré: “Dios ¿Qué es lo que quieres que yo haga?’ Él me dice:
“Simplemente ora. Simplemente dame gracias”. Yo pregunto: “¿Qué es lo que
vas a hacer?” Su respuesta será: “Dame Gracias”.
Con respecto a los
Estados Unidos, todo lo que sé hacer es dar gracias a Él. No sé lo que
pasará. Pero cuando termine, los Estados Unidos sabrán que “Dios está en Su
trono”, como dirían las personas religiosas.
Cuando el presidente
Bush fue elegido en 1988, él prometió que los Estados Unidos sería una
“nación amable y gentil”. Eso molestó a mi espíritu. Yo he pensado por años
que las políticas económicas de esta nación fueron irresponsables y no
estaba seguro que América necesitara ser una nación “amable”.
El
Señor sabía que estaba inquieto y una noche mientras estaba orando, Dios me
dijo claramente: “No tengas miedo; yo estoy con el presidente Bush”. Déjame
decirte, eso me confortó y te debería confortar.
CAPÍTULO 5
VINIERON FALSOS TESTIGOS
Si tú estás sirviendo a Dios, necesitas
tener en cuenta que la gente religiosa traerá falsos testigos en tu contra.
¿Por qué yo lo sé? Ellos trajeron falsos testigos para acusar a Jesús.
La fortaleza de Su Espíritu prevaleció contra de ellos. Tú tienes Su
Espíritu y la fortaleza del Espíritu que te hará estar de pie, también.
Vayamos a Mateo 26:57-68:
57 Los que prendieron a Jesús lo
llevaron al sumo sacerdote Caifás, adonde estaban reunidos los escribas y
los ancianos.
58 Pero Pedro lo siguió de lejos hasta el patio del
sumo sacerdote; y entrando, se sentó con los guardias para ver el fin.
59 Los principales sacerdotes, los ancianos y todo el Concilio, buscaban
falso testimonio contra Jesús para entregarlo a la muerte
Buscaban
falso testimonio. Ellos ni siquiera querían la verdad. Es asombroso que el
concilio de los sumos sacerdotes, los ancianos y la gente religiosa buscaran
falso testimonio contra de Jesús. ¿Vez la falsedad? Es la misma falsedad que
veo hoy en el cuerpo de Cristo entre los líderes religiosos. Es el falso
testimonio.
En los setentas, oí un líder religioso decir que aquellos
de nosotros que hablamos en lenguas estábamos balbuceando y eso es
simplemente incomprensible para hablar. Él es un hombre equivocado y
necesita arrepentirse.
Dios me dijo que todos los que hayan dicho eso
tienen que arrepentirse. La gente que hace acusaciones falsas acerca de los
cristianos carismáticos tiene el mismo espíritu de aquellos que dieron falso
testimonio contra Jesús para matarlo.
Intercesión por la Gente de
Dios
He estado orando a Dios contra las acusaciones a los cristianos
carismáticos en América. He estado orando por los ancianos y líderes
religiosos que se han burlado de los cristianos carismáticos y nos han
llamado cultos.
Yo no fui criado como un cristiano carismático, pero
mi oración a Dios es como la que Moisés oró al Padre cuando Él quería
destruir a la gente judía. Mi oración, mi intercepción, empezó cuando oí
acerca de la sentencia que se le dio a Jim Bakker.
Yo dije: “Dios, no
te voy a dejar que vayas más lejos. Como Moisés dijo: Tú estás enojado y Tu
juicio ha empezado en la casa de Dios. Pero Tú estás dando oportunidad para
que la gente religiosa diga, eso prueba que esa gente no es de Dios; eso
prueba que esa gente está involucrada en un culto”.
Empecé a orar,
interceder y pararme delante de Dios y yo dije: “Eso es suficiente. Yo seré
como Moisés. Tú puedes borrarme del libro si Tú quieres, pero el juicio ha
ido bastante lejos con los carismáticos. En cuanto a mí me concierna, Tú
necesitas tener misericordia de ellos”.
Yo creo que Dios oyó mi
oración. Puedes pensar lo que quieras, pero mi mensaje a los ancianos, los
sumos sacerdotes y los líderes religiosos en esta tierra es este:
PROFECÍA:
Nuestro Dios reina. Y Él vendrá y tú sabrás que Él es Dios.
Él es Dios en la tierra y tú sabrás que nosotros quienes no nos hemos unido
a sus organizaciones, pero hemos venido a ser independientes, no nos
inclinaremos a tus organizaciones religiosas y tus tradiciones religiosas.
Pero iremos hacia adelante con el poder de Dios y demostrar el poder en esta
tierra. Y tendrás que ver entonces que el Dios de Abraham, Isaac y Jacobo
mora en esta gente que es llamada carismáticos y cultos, como tú has dicho.
Pero, de hecho, Dios te diría: Eres tú el que necesita ver dentro de ti y
ver qué clase de organización tú eres, mirar qué clase de gente tú eres y
ver si has intentado en seguirme, obedecer mis mandamientos, hacerlos y
escuchar Mi voz. ¿O encontrarás que tú estás unido a tus ídolos y que estás
en orgullo y envanecido en tu inteligencia y, de hecho, que tú no has tomado
el tiempo para humillarte, orar y buscar Mi cara y orar por estos que están
allá que tú piensas que no son guiados por Mi? Pero en vez de eso, has
criticado, condenado y traído juicio sobre ellos. Pero te diré que Mi juicio
ciertamente vendrá a la tierra y ningún hombre escapará. Pero Mi juicio
vendrá primero en la casa de Dios y se extenderá en toda la tierra. Y el
mundo sabrá que Yo soy el Dios de Abraham, Isaac y Jacobo quien mandó a Su
hijo a morir por toda la raza humana y que cualquiera que crea en Él, que
quiere decir: depender de, adherirse a y confiar en Él, verá Su salvación.
Gracias, Señor Jesucristo. Yo no sabía que el Espíritu de Dios me iba a
dejar decir esto, pero obviamente lo hizo.
Ellos Buscaron Falso
Testimonio
Mira otra vez en Mateo 26:59:
59 Los principales
sacerdotes, los ancianos y todo el Concilio, buscaban falso testimonio
contra Jesús para entregarlo a la muerte
60 pero no lo hallaron,
aunque se presentaron muchos testigos falsos. Pero al fin vinieron dos
testigos falsos
61 que dijeron: —Éste dijo: “Puedo derribar el Templo
de Dios y en tres días reedificarlo.”
El único testigo que ellos
pudieron encontrar contra Jesús se basaba en lo que Él dijo en Juan 2:19.
Aun así, en Marcos 14:58 nos dice que sus testigos no estaban de acuerdo.
Mateo 26:62: continúa:
62 Se levantó el Sumo sacerdote y le
preguntó: —¿No respondes nada? ¿Qué testifican estos contra ti?
63
Pero Jesús callaba. Entonces el sumo sacerdote le dijo:
—Te conjuro por
el Dios viviente que nos digas si eres tú el Cristo, el Hijo de Dios.
64 Jesús le dijo: —Tú lo has dicho. Y además os digo que desde ahora
veréis al Hijo del hombre sentado a la diestra del poder de Dios y viniendo
en las nubes del cielo.
Jesús profetizó Su resurrección y Su segunda
venida.
Continúa con el verso 65:
65 entonces el Sumo
sacerdote rasgó sus vestiduras, diciendo: —¡Ha blasfemado! ¿Qué más
necesidad tenemos de testigos? Ahora mismo habéis oído su blasfemia.
66 ¿Qué os parece? Y respondiendo ellos, dijeron: —¡Es reo de muerte!
Él no había hecho algo, pero era culpable de muerte.
67 entonces
lo escupieron en el rostro y le dieron puñetazos; y otros lo abofeteaban,
68 diciendo: —Profetízanos, Cristo, quién es el que te golpeó.
Isaías 50:6 profetizó que Jesús daría su espalda a los heridores y sus
mejillas a los que le arrancarían la barba. Jesús leyó el libro de Isaías
antes de ir a la cruz y Él sabía que es lo que le iba a pasar, aun así, Él
no se quejó. Siempre me maravilla la fortaleza del Señor Jesús.
Pedro
Negó a Jesús
Jesús fue traicionado por Judas, uno de los doce
discípulos y se dio falso testimonio contra Él. Pedro, otro de los doce, lo
negó.
Mira en Mateo 26:69-75:
69 Estando Pedro sentado fuera,
en el patio, se le acercó una criada y le dijo: —Tú también estabas con
Jesús, el galileo.
70 Pero él negó delante de todos, diciendo: —No sé lo
que dices.
71 Saliendo él a la puerta, lo vio otra y dijo a los que
estaban allí: —También éste estaba con Jesús, el nazareno.
72 Pero él
negó otra vez con juramento: —¡No conozco al hombre!
73 Un poco
después, acercándose los que por allí estaban, dijeron a Pedro:
—Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu manera de hablar te
descubre.
74 Entonces él comenzó a maldecir y a jurar: —¡No conozco
al hombre!
Y en seguida cantó el gallo.
75 Entonces Pedro se
acordó de las palabras que Jesús le había dicho: «Antes que cante el gallo,
me negarás tres veces.» Y saliendo fuera, lloró amargamente.
Pedro lo
negó. Judas lo traicionó. Dos de los doce. Ellos eran sus asociados más
cercanos, aun así, ellos lo negaron y traicionaron.
Sin embargo, no
los condenes. Después de que Jesús murió, Pedro vino a ser uno los más
grandes apóstoles de la historia, si es que puedes usar esas palabras. Él
obedeció a Jesús.
Pedro dijo en 2 Pedro 1:14 que Jesús le dijo cuándo
moriría. Jesús debió estar complacido con él. Jesús lo mantuvo vivo hasta
que él completó lo que él fue llamado a hacer y después Él le dijo es tiempo
de “abandonar el cuerpo”.
Jesús sabía que Judas tenía un demonio
cuando Él lo escogió. Aun así, Él caminó con Él y lo amó y lo ungió para
predicar el evangelio. Ese es el Espíritu que está en ti y en mí, uno que
amara a la gente a pesar de que ellos no son fáciles de amar.
Trigo y
Cizaña
Jesús dijo en Mateo 13:30 que el trigo y la cizaña crecen
juntos. ¿Puedes amar a una cizaña? ¿Eres tan santurrón que no puedes estar
alrededor de una cizaña?
Es mejor que sepas que las cizañas se
sentarán a tu derecha y tu izquierda. Tú preguntas: “¿En mi iglesia?”
Seguro, Tú preguntas: “¿Yo soy una cizaña?” Yo no lo sé. Si tú no sabes si
eres un trigo o una cizaña, tú necesitas orar y buscar a Dios.
El
trigo y la cizaña crecerán juntas. Jesús dijo que no molestaran a la cizaña,
que no la arrancaran. Él también dijo que el demonio plantó la cizaña.
Simplemente te estoy diciendo lo que Jesús dijo. Tú dices: “Yo no quiero oír
esto”. No te culpo.
Estas palabras me asustaban gravemente. Yo le
decía a Jesús: “¿Qué tal si soy una cizaña? ¿Qué tal si yo soy un falso
profeta? Yo quiero renunciar ahora mismo. ¿Por qué no me doy por vencido y
me voy por mi propio camino?” Yo oí a Él decir: “Si renuncias ahora, tú
nunca lo sabrás”.
Tú no sabes lo que eres. No seas moralista. No te
juzgues a ti mismo. Pablo dijo que él no se juzgó a sí mismo. El camino
cristiano es un camino de gracia y nada más. Un camino de misericordia.
Nunca te asegures de que no tengas algo mal en ti.
Si alguna vez
pienso que no hay nada malo en mí, o si pienso que me equivoque con Dios, me
pongo inmediatamente de cara al suelo delante de Dios. Lo hice hoy. Empecé a
orar: “Dios, dame la gracia para oír Tu voz, obedecerte y caminar con
humildad delante de ti”. Él lo hará, también. Eso es lo que me mantiene
adelante.
Tú nunca vendrás a un lugar con Dios donde tú pienses que
ya lo lograste. Todo lo que puedes hacer es orar a Dios que estés aquí
dentro de 15 minutos. No pienses en el mañana.
No tengo alguna
confianza en la gente quien tiene su calendario de predicación reservado con
dos años de anticipación. La gente con una agenda llena de citas reservadas
para predicar, debe perder sus agendas en un lago. Que Dios los perdone.
CAPÍTULO 6
JESÚS ANTE LAS AUTORIDADES
Se
reunieron los ancianos del pueblo, los principales sacerdotes y los
escribas, llevaron a Jesús a su consejo y empezaron a preguntarle. Ellos le
preguntaron si Él era el Cristo. Él dijo que si les digiera, ellos no
creerían ni lo dejarían ir. Además, Él dijo que muy pronto se sentaría a la
diestra del poder de Dios.
Ellos continuaron interrogándole,
preguntándole si Él era el Hijo de Dios. Jesús respondió en Lucas 22:70: “…
vosotros decís que lo soy”. Ellos distorsionaron sus palabras, dando la
impresión de que Él dijo que era el Hijo de Dios.
Jesús Ante Pilato
Ahora, continuemos con Lucas 23:1-7:
1 Levantándose entonces
todos, llevaron a Jesús a Pilato.
2 Y comenzaron a acusarlo,
diciendo: —Hemos encontrado que este pervierte a la nación, y que prohíbe
dar tributo a César diciendo que él mismo es el Cristo, un Rey.
Ves
como el demonio pervierte la verdad.
3 Entonces Pilato le preguntó,
diciendo: —¿Eres tú el Rey de los judíos?
Respondiéndole él, dijo: —Tú lo
dices.
4 Pilato dijo a los principales sacerdotes y a la gente:
—Ningún delito hallo en este hombre.
5 Pero ellos porfiaban,
diciendo: —Alborota al pueblo, enseñando por toda Judea, comenzando desde
Galilea hasta aquí.
6 Entonces Pilato, cuando oyó decir «Galilea»,
preguntó si el hombre era galileo.
7 Y al saber que era de la
jurisdicción de Herodes, lo remitió a Herodes, que en aquellos días también
estaba en Jerusalén.
Después de escuchar las falsas acusaciones de la
gente, Pilato no encontró delito en Jesús. La gente protestó vehementemente.
Pilato buscando una excusa para quitar a Jesús de su corte, lo mandó con
Herodes, quien tenía la jurisdicción en Galilea, cuando las supuestas falsas
enseñanzas se llevaron a cabo.
Jesús Ante Herodes
Jesús fue
enviado a Herodes, quien estaba en Jerusalén en ese tiempo. Lucas 23:8-12,
describe a Jesús ante Herodes:
8 Herodes, al ver a Jesús, se alegró
mucho, porque hacía tiempo que deseaba verlo, porque había oído muchas cosas
acerca de él y esperaba verlo hacer alguna señal.
Herodes no estaba
contento porque Jesús era el Mesías. Más bien, él estaba contento de ver a
Jesús porque quería verlo hacer un milagro.
Ven a Jesús, No a los
Milagros
¿Sabías que la gente va a reuniones solamente para ver
milagros? Ellos oyen acerca de un milagro y corren a verlo. Eso es lo que
Herodes quería.
No hay algo malo con milagros. Pero tú no quieres ir
a Jesús simplemente por ver un milagro. Tú quieres ir a Jesús para saber de
Él, obedecerlo y servirlo, no a extasiarte por Sus milagros.
La gente
absolutamente está “Oh” y “Ah” cuando ellos ven un milagro. Quince minutos
más tarde, cuando ellos tienen un dolor de estómago, llaman al doctor. ¿Por
qué? Por la dureza de sus corazones. Ellos tienen miedo.
Él No
Respondió Alguna Pregunta
Continuemos con Lucas 23:9:
9 Le
hizo muchas preguntas, pero él nada le respondió.
Jesús no respondió
algo a Herodes. Él ni siquiera respondió a las preguntas de los hombres. Eso
sería una posición agradable para estar de pie ante el principal
interrogador y no responder alguna de las preguntas. Mira a Jesús; Él es
nuestro ejemplo. No tienes que responder a sus preguntas.
En verso 10
dice:
10 Estaban los principales sacerdotes y los escribas acusándolo
con gran vehemencia.
Notas cómo se enoja la gente cuando no contestas
sus preguntas. Ese es el modo en Jesús caminó. Tú no tienes que contestar
alguna de las preguntas. En vez de eso tú pregunta una.
La gente
viene y me dice: “Dime: ¿Es esto así?” Yo digo: “¿Por qué me preguntas? ¿Por
qué quieres saber?” No respondo. Los hace enojar. Yo digo: “Yo no tengo que
contestarte cada pregunta. Mi Señor no lo hizo y yo tampoco”.
El
Espíritu dentro de mí me da la fortaleza. Es chistoso cuando la gente
religiosa hace preguntas y tú los miras y dices: “¿De qué estás hablando?
¿Tienes algún problema? ¿Por qué preguntas?” Les hago todo tipo de preguntas
a cambio.
Predicadores, Es Una Grosería
En el verso 11
continuamos:
11 Entonces Herodes con sus soldados lo menospreció y se
burló de él, vistiéndolo con una ropa espléndida; y volvió a enviarlo a
Pilato.
¿Te gustaría que el rey y sus soldados se burlaran de ti?
Una vez, estuve involucrado en un caso judicial en McKinney, Texas. Y
también estuve involucrado en un caso juvenil al mismo tiempo. La corte del
caso juvenil estaba en el quinto piso del juzgado y el otro caso estaba en
el cuarto piso.
Yo estaba el quinto piso y cuando era tiempo de
aparecer en la otra corte, el juez mando decir que me quería en su corte. Yo
dije: “Dile que voy a estar ahí en cuanto termine aquí”. Fui amable al
respecto.
El juez empezó a reírse de mí y se burló abiertamente en la
corte. Él dijo: “Tenemos a un predicador en el quinto piso que no puede
encontrar su camino al cuarto”.
No estoy intimidado por esa clase de
declaración. Tengo al mismo Jesús en mí quien compareció ante Herodes, el
mismo Espíritu. Simplemente me reí y oré que Dios perdonara al juez por esas
declaraciones.
La mayoría de los jueces y otras personas en América
religiosa piensan que “predicadores” no es, más que una grosería. Es verdad.
Tú no tienes a algún ministro en alta estima. Los utilizas y tú lo sabes.
Esa ha sido la situación en América toda mi vida.
Los Enemigos Se
Hicieron Amigos
Un cristiano incluso encontrará dos enemigos juntos
contra él. Eso es lo que pasó en Lucas 23:12:
12 Y aquel día, Pilato
y Herodes, que estaban enemistados, se hicieron amigos.
Estos dos,
Herodes y Pilato, habían sido enemigos. Ellos habían estado uno contra el
otro, sin embargo, ellos se unieron ese día. Cuando te traigan, como
llevaron a Jesús, ante las personas que quieren hacerte daño de cualquier
manera que puedan, ellos se convertirán en amigos. Ellos unirán sus fuerzas
contra ti.
Su Espíritu Se Ofende
Si hay un tema en el cual la
gente de algunas denominaciones está de acuerdo, es que aquellos quienes
somos cristianos carismáticos, quienes predicamos el evangelio, echamos
fuera demonios y sanamos a los enfermos, no somos de Dios. Es lo único en lo
que he oído ponerse de acuerdo.
Los archienemigos estarán de acuerdo
en que yo no soy de Dios. Yo sé lo que dicen. Me lo han dicho en mi cara. No
me ofende en absoluto. Simplemente sonrió y me rio de ellos.
Que es
lo peor, la gente de algunas denominaciones nunca admitirá que ellos son
así. Ellos no pueden ver su hipocresía porque son deshonestos en sus
corazones.
En 1970 cuando fui bautizado en el Espíritu Santo, le dije
a mi papá y mamá, ambos asistían a la iglesia Bautista, que yo hablaba en
lenguas. Cuando le dije a mi mamá, ella dijo: “Doyle, te dije que te
alejaras de esas personas”. Yo le dije: “Mamá, nunca te oí”.
Yo los
visite después de eso y fuimos a su iglesia. El ministro bautista predicó un
sermón muy enojado, criticando a la gente que habla en otras lenguas. Mi
mamá estaba enojada por eso.
Después de llegar a la casa, y ella me
dijo: “Yo no puedo entender por qué él hizo eso. Nunca le dije que hablabas
en lenguas”. Yo le dije: “Fue un espíritu en ese hombre que se ofendió con
mi presencia, no él”.
Es difícil de ofenderme ahora. La mayoría de
las cosas que la gente religiosa dice no me molesta. Casi he llegado a un
lugar donde nada me molesta. Ninguna persona, ni un espíritu, nada.
Tú dices: “¿Cómo puedes estar tan seguro de ello?” Porque es el modo en que
Jesús era. Y Su Espíritu está en nosotros. Si Él nos es revelado y nuestras
almas se salvan, lavan y limpian, podemos caminar en la tierra del mismo
modo que Jesús caminó. Ellos no lo ofendieron, ¿verdad?
CAPÍTULO 7
“¿QUÉ MAL HA HECHO ÉSTE?”
Después de que Herodes y
sus hombres se burlaron de Jesús, ellos lo mandaron con Pilato. Pilato
reunió a los principales sacerdotes, los gobernantes y la gente. Él les dijo
que ambos, Herodes y él habían examinado a Jesús y ningún delito encontraron
digno de muerte.
Pilato le dijo a la multitud que castigaría y
soltaría a Jesús. Pero la multitud gritó que querían que soltaran a Barrabás
e incitaron a Pilato a crucificar a Jesús.
Pilato continúo
discutiendo con la multitud y habría soltado a Jesús. Ahora lee en Lucas
23:22-25:
22 Él les dijo por tercera vez: —¿Pues qué mal ha hecho
éste? Ningún delito digno de muerte he hallado en él; lo castigaré y lo
soltaré.
Pilato le dijo a la gente que no había encontrado algo digno
de muerte en Jesús. Jesús no había hecho algo.
23 Pero ellos
insistían a gritos, pidiendo que fuera crucificado; y las voces de ellos y
de los principales sacerdotes se impusieron.
24 Entonces Pilato
sentenció que se hiciera lo que ellos pedían.
25 Les soltó a aquel
que había sido echado en la cárcel por rebelión y homicidio, a quien habían
pedido, y entregó a Jesús a la voluntad de ellos.
Me maravilló de
como Pilato cedió a la demanda de la gente. Aún más sorprendente es la
fortaleza de Jesús, como fue cambiado por Barrabás, alguien quien no conoció
pecado por uno que era culpable de rebelión y homicidio. Eso fue un cambio,
¿Verdad?
Jesús Fue Azotado
Ahora, ve a Mateo 27:26. Vamos a ir
y regresar, porque quiero que veas el orden en el cual estos eventos
ocurrieron. Pasé casi un año estudiando la muerte de Jesús. Dios me enseñó y
mostró como estos eventos tomaron lugar:
26 Entonces les soltó a
Barrabás, y habiendo azotado a Jesús, lo entregó para ser crucificado.
Jesús fue azotado con el látigo romano.
27 Entonces los soldados
del gobernador llevaron a Jesús al pretorio y reunieron alrededor de él a
toda la compañía.
28 Lo desnudaron y le echaron encima un manto
escarlata;
Quiero recordarte otra vez, que el propósito de este
libro es mostrarte que le pasó a Jesús. Sin embargo, es aún más importante,
que tú y yo entendamos que tenemos Su Espíritu en nosotros. La fortaleza que
Jesús tiene es increíble.
Jesús No Se Ofendió
Después que
Pilato azotó a Jesús, lo llevó al pretorio o a la casa del gobernador y
trajeron a toda la banda de soldados. Los soldados desnudaron a Jesús y lo
vistieron con un manto escarlata. Ahora, lee en Mateo 27:29:
29
pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano
derecha; e hincando la rodilla delante de él, se burlaban, diciendo:
—¡Salve, rey de los judíos!
Jesús no se enojó. No se resintió. Él no
se amargó. Él no tomó su poder y lo usó contra ellos. Él se humilló hasta la
muerte en la cruz.
Tú No Necesitas Ofenderte
El Espíritu de
Cristo dentro de mí tampoco se ofende. No te estoy diciendo que Satanás
podría ponerme en una situación que me ofendería. Te estoy diciendo que ha
pasado un tiempo desde la última vez que lo hizo.
El Espíritu de Cristo
dentro de mí, me ha traído hasta el punto en que yo simplemente ignoro lo
que la gente dice. Ellos no me ofenden. Es difícil ofenderme.
No soy
yo, sin embargo, es el Espíritu de Cristo en mí. No puedes ofenderlo.
Mientras mantenga mi alma fuera de una situación, no seré ofendido. Si tú
quieres tener tu propia justicia, vas a ser ofendido. Pero Jesús no se
ofendió y si tú caminas como Él caminó, tampoco lo serás.
Jesús Te
Guiará
Mateo 27:30 continúa:
30 Le escupían, y tomando la
caña lo golpeaban en la cabeza.
Hay algo al escupir a la gente que
los enfurece. Bueno, prepárate, porque puede pasar. Le pasó a nuestro Señor,
tu Señor.
Sin embargo, debes saber esto, Jesús nunca dejará que
enfrentes una situación difícil hasta que estés listo. Él sabe a dónde te
puede guiar. Tú no tienes que temer que Dios permita que alguien te ponga
una corona de espinas en tu cabeza se arrodille ante ti y se burle de ti.
Él no dejará que te escupan, cacheteen, jalen los cabellos o hieran por
detrás. Tú no debes tener miedo de esas cosas, porque si tú obedeces a
Jesús, no te pasará hasta que estés listo.
He aprendido que Jesús no
te guiará a una situación que no puedas soportar. Eso es tranquilidad, ¿no
es así? Tú podrás soportar fácilmente, pensarás, “¿No es agradable esto?”
Justicia, No Justificación Propia
Me siento apenado por los
cristianos quienes piensan que son perseguidos por el bien de la justicia,
cuando en realidad ellos son perseguidos por su propia justificación. Hay
mucha diferencia entre las dos.
Cuando tú te dejas guiar por el
Espíritu, Él no te llevará a una situación por encima de tu cabeza. Él no te
guiará para ser derrotado. Él te guiará siempre a la victoria.
Si
algo te pasa y tú estás caminando en el Espíritu, has todo lo posible en ti
para no ofenderte. No permitas ofenderte. Humíllate. Di: “Dios, me humillo
ante ti. Me reusó a permitir que esto me ofenda”.
Dios te quitará la
ofensa. No te ofenderás. Serás más y más como la imagen de Jesús. Gracias a
Dios por esto.
No tengo miedo de decir esto, le doy gracias a Dios de
como es difícil ofenderme. Es la gracia de Dios. Es Jesús en mí. No soy yo.
Solamente he aprendido a escucharlo.
Ellos Lo Llevaron
Continúa con Mateo 27:31:
31 Después de haberse burlado de él, le
quitaron el manto, le pusieron sus vestidos y lo llevaron para crucificarle.
32 Al salir hallaron a un hombre de Cirene que se llamaba Simón; a éste
obligaron a que llevara la cruz.
33 Cuando llegaron a un lugar
llamado Gólgota, (que significa: «Lugar de la Calavera»),
Jesús fue
desnudado. Después Él fue vestido con un manto escarlata, coronado con una
corona de espinas y una caña en Sus manos. Los soldados se arrodillaron ante
Él y se burlaron. Jesús estaba en una situación difícil. Y aun así nunca se
ofendió. Entonces, Él fue llevado a un lugar llamado Gólgota para ser
crucificado.
Él No La Quiso Beber
Ahora, ve en Mateo 27:34.
Esto es un evento extraordinario:
34 le dieron a beber vinagre
mezclado con hiel; pero, después de haberlo probado, no quiso beberlo.
¿Sabes porque Él no quiso beber? Porque la escritura (Salmo 69:21) dijo
Él beberá vinagre, no vinagre con hiel. Esa es la fortaleza de Su Espíritu.
Es el Espíritu que está en ti y en mí.
¿Si a ti y a mí nos dieran una
bebida que no deberíamos tomar, tendríamos la fortaleza en el espíritu en
reusar la bebida? Sí, porque tú y yo tenemos el Espíritu de Jesús.
Quiero que veas que Jesús caminó correcto. Él no cometió algún error. Él no
desobedeció la escritura. Sin Su Espíritu en nosotros, casi todos nosotros
habríamos tomado la bebida de vinagre, simplemente para terminar con nuestra
muerte. Sin embargo, Jesús tenía la fortaleza de obedecer al Padre y porque
tenemos Su Espíritu, podemos hacerlo también.
La muerte, el entierro
y la resurrección de Jesús fueron profetizadas en la ley de Moisés, en los
profetas y en los salmos. La precisión con la que se cumplieron estas
profecías es realmente increíble.
CAPÍTULO 8
JESÚS, EL
REY DE LOS JUDÍOS
Es extraordinaria la fortaleza del Espíritu de
Jesús mientras Él soportaba Su muerte, entierro y resurrección. Ese Espíritu
y esa fortaleza están en nosotros, si es que hemos recibido a Jesús.
Necesitamos examinar y entender como se comportó, si es que Él es nuestro
ejemplo.
Empieza con Mateo 27:35-37:
35 Cuando lo hubieron
crucificado, repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes, para que se
cumpliera lo dicho por el profeta: «Repartieron entre sí mis vestidos, y
sobre mi ropa echaron suertes.»
36 Y sentados lo custodiaban allí.
37 Pusieron sobre su cabeza su causa escrita: «ÉSTE ES JESÚS, EL REY DE
LOS JUDÍOS.»
Los soldados pusieron esta inscripción encima de Su
cabeza. Eso es exactamente lo que Él era. Me maravilla lo insensata que se
veía esa gente en sus propios ojos. Dios los ridiculizó. Si creemos en Él,
como Jesús lo hizo, Él siempre confundirá a nuestros enemigos y la palabra
de Dios siempre se realizará en nuestras vidas.
Él Les Mostró Sus
Manos y Su Costado
Después que Jesús ascendió al cielo, Él vino a Sus
discípulos y les mostró Sus manos y Su costado. Tú dices: “¿Qué tiene que
ver con mi seguir a Dios?” Es esencial para tú camino con Dios y entenderás
el por qué en las siguientes páginas.
Jesús se apareció a los
discípulos después de haber sido crucificado y resucitado de entre los
muertos. Mira en Juan 20:19-20:
19 Cuando llegó la noche de aquel
mismo día, el primero de la semana, estando las puertas cerradas en el lugar
donde los discípulos estaban reunidos por miedo de los judíos, llegó Jesús
y, puesto en medio, les dijo: —¡Paz a vosotros!
20 Dicho esto, les
mostró las manos y el costado. Y los discípulos se regocijaron viendo al
Señor.
Jesús les mostró Sus manos y Su costado. Los discípulos
estaban contentos, porque ellos sabían que este era Jesús nuestro Señor. Los
discípulos sabían que era Jesús, porque ellos vieron Sus manos y Su costado.
Tomás Vio Sus Manos y Costado
Tomás, quien era uno de los doce
discípulos, no estaba con ellos cuando Jesús se apareció. En Juan 20:25, los
otros discípulos le dijeron a Tomás que habían visto a Jesús:
25 Le
dijeron, pues, los otros discípulos: —¡Hemos visto al Señor! Él les dijo:
—Si no veo en sus manos la señal de los clavos y meto mi dedo en el lugar de
los clavos, y meto mi mano en su costado, no creeré.
Tomás dijo que
no crearía a menos que viera la señal de los clavos y pusiera su dedo en el
lugar de los clavos y meter su mano en el costado de Jesús. Las cicatrices
son la evidencia de que realmente estás viendo a Jesús. Sin embargo, en la
iglesia de América, tú oirás a la gente decir que Jesús no tiene cicatrices
en Sus manos.
De hecho, he oído a un predicador internacionalmente
conocido decir que Jesús se le ha aparecido en varias ocasiones y que Jesús
no tiene cicatrices en Sus manos. ¿Vio este predicador a Jesús? Decide por
ti mismo.
“Mira Mis Manos”
El Jesús de Nazaret quien resucitó
al tercer día y se apareció a sus discípulos tiene cicatrices en Sus manos y
en Su costado. Él le dijo a Tomás que pusiera su dedo en la señal de los
clavos y metiera su mano en su costado, para que Tomás creyera. Mira en Juan
20:27:
27 Luego dijo a Tomás: —Pon aquí tu dedo y mira mis manos;
acerca tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.
Después que Jesús me enseñó esto, yo dije: “Señor, oro para que el día
en que Tú te me aparezcas, Tú me des la gracia de pedir ver Tus manos”. Yo
no sé si le preguntaré, pero lo digo ahora: “Jesús, dame la gracia de
pedírtelo”.
Cuando Jesús aparezca, puede que esté tan asombrado que
no sabré qué hacer. Yo ruego está oración ahora, sin embargo, cuando Él se
aparezca, Él tendrá que decir: “Bueno, Doyle me ha pedido. Se los tendré que
mostrar”.
Jesús tendrá que decir: “Doyle, tú pediste ver Mis manos.
Lo pediste en público. Está en tus casetes y en tus libros en América y en
todo el mundo. Tengo que enseñarte mis manos y Mi costado. Quiero que sepas
que este soy Yo”.
La razón por la que digo: “Yo quiero saber,
Señor”, es porque no quiero que un impostor me hable. Por eso es esencial
que entiendas, cómo sabrás que Jesús es el que te está hablando.
Aunque nunca he visto a Jesús, yo creo en Él. Camino con Él. Algunos
predicadores afirman haber estado en el cielo, haber visto a Jesús, haber
hablado con Él, haberle puesto las manos en sus manos y otras cosas
similares
Jesús nunca me ha hecho algo de eso. Le pregunté una vez:
“¿Cuándo vas a visitarme?” Él dijo: “Tú me crees sin verme”. Eso me hace una
persona muy simple, ¿verdad? Alabado sea Dios, voy a permanecer como una
persona simple.
Crucificado en Medio de Dos Ladrones
Cuando
Jesús fue crucificado, Su cruz estaba situada en medio de dos ladrones
quienes fueron crucificados con Él. Mira en Mateo 27:38:
38 Entonces
crucificaron con él a dos ladrones, uno a la derecha y otro a la izquierda.
Jesús había sido burlado, azotado, acusado falsamente, escupido y le
arrancaron los pelos de su barba. Ahora, Él tenía que lidiar con los dos
ladrones. Mira en Lucas 23:39-43:
39 Uno de los malhechores que
estaban colgados lo insultaba diciendo: —Si tú eres el Cristo, sálvate a ti
mismo y a nosotros.
¿Estaba Jesús en posición de ser ofendido? Él
estaba en la cruz, estirado, con clavos en Sus manos y en Sus pies. Uno de
los ladrones insultándolo: “…Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a
nosotros”. ¿Te habrías ofendido?
En Lucas 23:40 continúa:
40
Respondiendo el otro, lo reprendió, diciendo: —¿Ni siquiera estando en la
misma condenación temes tú a Dios?
Quiero que veas que los que
insultan no temen a Dios.
40… ¿Ni siquiera estando en la misma
condenación temes tú a Dios?
41 Nosotros, a la verdad, justamente
padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; pero éste
ningún mal hizo.
42 Y dijo a Jesús: —Acuérdate de mí cuando vengas
en tu Reino.
43 Entonces Jesús le dijo: —De cierto te digo que hoy
estarás conmigo en el paraíso.
Tenemos que caminar como Jesús caminó.
Él estaba en mucha adversidad y el ladrón lo agravó con insultos. ¿Qué
hubieras hecho tú? Jesús, el hombre que tú dices imitar, perdonó a los
ladrones.
¿Podrías haber hecho esto? ¿Habrías hecho un lugar para
ellos en el paraíso? Sí, podrías, pero solamente porque Su Espíritu está
unido a tú espíritu. Ese Espíritu es tú fortaleza.
CAPÍTULO 9
JESÚS EN LA CRUZ
Ahora, ve a Mateo 27:39-46. Estos son los
eventos que tomaron lugar cuando Jesús estaba en la cruz:
39 Los que
pasaban lo insultaban meneando la cabeza
40 y diciendo: «Tú, el que
derribas el Templo y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo. Si eres
Hijo de Dios, desciende de la cruz.»
41 De esta manera también los
principales sacerdotes, junto con los escribas, los fariseos y los ancianos,
se burlaban de él y decían:
42 «A otros salvó, pero a sí mismo no se
puede salvar. Si es el Rey de Israel, que descienda ahora de la cruz, y
creeremos en él.
43 Confió en Dios; líbrelo ahora si le quiere,
porque ha dicho: “Soy Hijo de Dios.”»
44 Del mismo modo lo insultaban
los ladrones que habían sido crucificados con él.
45 Desde la hora
sexta hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena.
46
Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: «Elí, Elí, ¿lama
sabactani?» (que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has
desamparado?»).
Se Burlaron de Jesús
En el verso 39
empieza:
39 Los que pasaban lo insultaban meneando la cabeza
Los que pasaban se burlaban de Él, insultándolo y hablando mal contra Él. En
el Salmo 11:2, el salmista dice que los malos tienden el arco, disponen sus
saetas sobre la cuerda, para lanzarlas en oculto a los rectos de corazón. En
el Salmo 64:3 dice que afilan como espada su lengua; lanzan como una saeta
suya la palabra amarga. Aquí, los que pasaban, insultaban a Jesús
abiertamente.
Desciende de la Cruz
El versículo 40 continúa:
40 y diciendo: «Tú, el que derribas el Templo y en tres días lo
reedificas, sálvate a ti mismo. Si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz.»
Quiero que veas la tentación que Jesús pasó y el Espíritu que el hombre
tiene. Él puso Su Espíritu en nosotros. Él que se une al Señor es un solo
Espíritu.
La gente dijo: “…Si eres Hijo de Dios, desciende de la
cruz”. Él pudo haber descendido de la cruz si Él hubiera querido. Él era el
Hijo de Dios, exactamente como ellos decían.
Cuando Pedro tomó su
espada y cortó la oreja del siervo de un sacerdote, Jesús le dijo que él que
toma espada, a espada perecerá. Él le dijo a Pedro y al resto de los
discípulos que Él podía orar al Padre por doce legiones de ángeles y el
Padre se los mandaría. Él tenía esa autoridad. Él tenía la habilidad, pero
Él no la usó.
Si Jesús no hubiera querido, Él nunca habría ido a la
cruz. Pero Él escogió hacer la voluntad del Padre. En Mateo 26:39, Él oró:
“Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero,
sino como tú”.
Jesús Tenía un Mandamiento
¿Por qué Jesús no
usó Su autoridad y habilidad? Porque Él tenía un mandamiento de Dios, el
Padre.
En Juan 10:17-18, Jesús les dijo a los fariseos que tenía un
mandamiento del Padre, que Él pone su vida para volverla a tomar. Nadie me
la quita, sino que yo de mí mismo la pongo.
Jesús dijo que Él pone su
vida para volverla a tomar y que nadie se la quita. En Juan 2:19, Él le dijo
a la gente religiosa: “Destruid este templo y en tres días lo levantaré”.
Jesús tenía mucha fe. Él sabía que iba a ser resucitado de entre los
muertos. Él no fue a la cruz esperando permanecer muerto y quedarse en el
infierno. Él fue a la cruz sabiendo que iba a resucitar.
Los Líderes
Religiosos Se Burlarán de Ti
Mira en Mateo 27:41:
41 De esta
manera también los principales sacerdotes, se burlaban de él…
Los
líderes religiosos se burlarán de ti. Ellos se burlan de cualquiera que
camine en el Espíritu y ellos necesitan arrepentirse. Los líderes religiosos
en los Estados Unidos necesitan arrepentirse de lo que han dicho acerca de
los cristianos carismáticos.
Ellos necesitan humillarse, arrodillarse
ante Dios y pedirle que los perdonen de hablar contra de los cristianos
carismáticos. Dios está levantando un ejército en este país que será fuerte.
Todos ustedes tendrán la oportunidad de arrepentirse de las palabras malas
que han hablado acerca de aquellos que hablan en otras lenguas.
Mi
madre fue criada bautista y mi padre fue criado metodista. Cuando les dije
que hablaba en lenguas, mi madre dijo lo que casi toda la gente bautista
diría: “Te dije que te mantuvieras lejos de esas personas”.
Ella no
sabe que es los que está diciendo. Ella ha sido educada por la doctrina
bautista contra de los carismáticos, contra la gente quien tiene los dones
del Espíritu. Ha sido plantado en su corazón desde que ella era una niña
pequeña. Ella no puede ayudarse a sí misma.
Ignora a los Espíritus
Religiosos
Gracias a Dios, algunos de nosotros no ponemos atención a
los líderes religiosos. Ellos se burlan de nosotros ahora, pero todo está
bien. Dios tendrá Su día.
Los sacerdotes principales, los escribas y
ancianos se burlaron de Jesús y dijeron en Mateo 27:42:
42 «A otros
salvó, pero a sí mismo no se puede salvar. Si es el Rey de Israel, que
descienda ahora de la cruz, y creeremos en él.
“Si es el Rey de
Israel …” “Si…” Éste es el modo en que Satanás habla. Tú dices: “Esa es
gente hablando”. Sí, pero Satanás está usando sus lenguas. Esto es lo que
ellos dicen: “Si es el Rey de Israel, que descienda ahora de la cruz, y
creeremos en él”.
Jesús Confió en el Padre
En Mateo 27:43,
ellos continuaron:
43 Confió en Dios; líbrelo ahora si le quiere…
Lo que no sabían es que el Padre tenía a Jesús, Él estaba haciendo la
voluntad del Padre y los líderes religiosos lo crucificaron. Hoy, en los
Estados Unidos los líderes religiosos hacen lo que en Hebreos 6:6 dice: “y
recayeron, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios”. Ellos
crucifican a Jesús de nuevo, diariamente cuando ellos niegan el poder de Su
resurrección.
Levantando a la Gente
Ve en el verso 43 otra
vez:
…líbrelo ahora si le quiere…
El Padre tenía a Jesús. Él
le resucitó de entre los muertos y está sentado a Su diestra. Él está
sentado ahí ahora haciendo intercesión por ti y mí.
Pilato, la gente
judía, los principales sacerdotes, la gente religiosa y los ancianos dijeron
que el hombre era culpable. Dios dijo que Él no es culpable. Dios le
resucitó de entre los muertos.
Esto es lo que deseo para la gente de
América. Yo deseo que Dios los levante, para mostrar su poder a favor de
ellos y mostrar el poder de sí mismo, como Él lo declaró en 2 Crónicos 16:9.
Él hará saber al mundo que Dios, el Dios de Abraham, Isaac y Jacobo
tiene gente en quien Él mostrará Su gloria. Solo Dios será glorificado
mediante esa gente.
Tinieblas Sobre Toda la Tierra
Mateo 27:44
dice:
44 Del mismo modo lo insultaban los ladrones que habían sido
crucificados con él.
Los ladrones se unieron a la gente en burlas y
acusaciones contra Jesús.
Finalmente, vinieron tinieblas sobre toda
la tierra y Jesús clamó a gran voz en el verso 46: “…Dios mío, Dios mío,
¿por qué me has desamparado?” Con el pecado del mundo sobre Jesús, el Padre
tuvo que dar Su espalda.
CAPÍTULO 10
MUY LIMPIO ERES
DE OJOS
El Padre abandonó a Jesús cuando mis pecados, tus pecados y
los pecados de todo el mundo fueron puestos en Su cuerpo. Habacuc 1:13 dice
que Dios:
13 Muy limpio eres de ojos para ver el mal, ni puedes ver
el agravio (iniquidad);
No Hay Quien Sea Justo
Déjame decirte
ahora, no hay quien sea justo; nunca lo ha habido. Romanos 3:11-12 dice:
11 no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios.
12 Todos se
desviaron…
Isaías 53:6 dice:
6 Todos nosotros nos descarriamos
como ovejas, cada cual se apartó por su camino…
Ninguno de nosotros
está buscando a Dios. Tú no puedes nacer en la iglesia y decir que conoces a
Dios. Nacer en la iglesia no tiene algo que ver con conocer a Dios.
“Tú Tienes Que Nacer de Nuevo”
Yo fue criado con una familia que
“nació de nuevo”. Los dos, mi madre y padre recibieron a Cristo antes que yo
naciera. Eso no me dio algún acceso con Dios.
Tu familia cristiana no
te da acceso con Dios. Puedes ir a la iglesia todos los días y no tener
acceso a Dios. Sin embargo, ir a la iglesia es lo que las personas
religiosas hablan cuando se trata del acceso a Dios.
Una noche, vi a
una mujer dar su testimonio en la televisión. Ella dijo que siempre ha
conocido a Dios, porque ella había crecido en la iglesia. Me quedé sentado
en incredulidad.
Yo pensé: “Señor Jesús, ¿no saben nada mejor que
esto? ¿No saben que dijiste: “Tú tienes que nacer de nuevo?”
Por lo
general los líderes religiosos en este país no desean ofender a alguien.
Ellos dejarán que la gente dé su testimonio, no importa que tan equivocados
estén.
A Jesús no le importó a quien ofendiera, ¿Sabías esto? ¿Sabes
lo que Jesús les dijo a los líderes religiosos? Él dijo: “…Ustedes son unas
serpientes, hipócritas, guías ciegos, que cuelas el mosquito y tragas el
camello…” Ese es el hombre de amor.
Dios Tiene Suficiente Dinero
Tú no oyes a los predicadores en los Estados Unidos hablar de ese modo.
La verdad de Dios traerá mucho dinero. Sin embargo, un siervo de Dios no
necesita tu dinero. Un siervo de Dios siempre tiene suficiente dinero.
Nunca habría tomado este trabajo si Dios no me hubiera demostrado que Él
podía suplir mis necesidades. He trabajado para algunos de los hombres más
ricos de América. Dios me hacía predicar el evangelio y se enfadaban y no me
volvían a llamar.
Esto pasó una y otra vez por 12 años. Dios siempre
me traía otro cliente. Él siempre tuvo alguien que me diera dinero. Él me
enseñó en los 12 años como veterinario profesional.
Dios Sostiene a
Su Sirvo
Yo le prediqué el evangelio a un amigo en Dallas, uno de mis
mejores amigos que he tenido antes de ser cristiano. Al siguiente día, su
esposa me llamó y dijo: “Vamos a llevar a nuestros animales con otra
persona”. Ellos no querían tener nada que ver conmigo porque yo conocía a
Jesús.
Eso no me molestó ni me ofendió. No necesitaba su dinero. Dios
me enseñó antes de entrar al ministerio: “Yo Soy el ÚNICO que sostiene a mis
siervos. Yo Soy el ÚNICO quien suple tus necesidades”.
Entonces,
cuando Dios empezó la iglesia de Agua de Vida (Water of Life), cuando Dios
me mandó a hablar a la gente de Plano, ya sabía que Dios tenía gente lista
para suplir las finanzas. Yo sabía que Él haría que dieran dinero para hacer
lo que quisiera a través de este ministerio.
No he tenido miedo de
decir lo que Dios quiera que diga por temor a que el dinero sea cortado. Eso
no me molesta. Dios sostiene a Su siervo.
CAPÍTULO 11
FORTALEZA EN SU ESPÍRITU
Jesús hizo varias declaraciones cuando
Él estuvo en la cruz. Estas declaraciones demuestran la fortaleza del
Espíritu en ese hombre, Jesús. Proverbios 18:14 dice:
14 El ánimo del
hombre le sostendrá en su enfermedad, pero ¿quién sostendrá a un ánimo
angustiado?
Jesús no tenía un Espíritu angustiado (herido).
Cristianos Con Espíritus Angustiados (Heridos)
Alguien dijo que los
predicadores de América siempre están “tomando las cosas menores y las hacen
mayores”. Los predicadores no saben de qué están hablando cuando te dicen
que puede o no puede tener un cristiano.
Yo estaba escuchando a uno
la otra noche. Él estaba hablando acerca del espíritu de un hombre quien se
une al Señor. Este predicador dijo que nada le puede pasar al espíritu de un
cristiano. Él cito 1 Corintios 6:17: “Pero el que se une al Señor, un
espíritu es con él”.
Tengo una pregunta, para aquellos que dicen que
no le puede pasar algo al espíritu de una persona: ¿Has conocido a un
cristiano con el espíritu angustiado (herido)? Yo sí, he conocido a muchos
de ellos. Sin embargo, Dios los sana.
2 Corintios 7:1: dice:
1
…limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu…
De acuerdo
en este verso, tu espíritu puede contaminarse.
1 Tesalonicenses 5:23
dice:
23…y todo vuestro ser espíritu, alma y cuerpo — sea guardado
irreprochable
Tú espíritu tiene que guardarse irreprochable (sin
contaminación). No es bíblico decir, que nada le puede pasar al espíritu de
un cristiano.
Dios le está hablando a los predicadores: Tú necesitas
conocer la Biblia antes de empezar a predicar. Necesitas estudiar la Biblia
y no hacer declaraciones así. Tú y yo sabemos que los cristianos pueden
tener espíritus angustiados (heridos). He visto congregaciones enteras
angustiadas (heridas) por las obras malignas hechas por espíritus malignos.
“Padre, Perdónalos”
En Lucas 23:34: Jesús hizo intercesión por
los transgresores quienes lo estaban crucificando. Él dijo:
34
…Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.
“Padre, esta gente
quien me está crucificando no sabe lo que hace”. Eso es perdonar. Así es
como Su Espíritu trabajará en ti. La gente no sabe lo que está haciendo,
perdónalos. Esas son palabras muy fuertes.
Jesús estaba en la cruz,
en medio de ladrones y Él dijo: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que
hacen”.
“Hoy Estarás Conmigo en el Paraíso”
La segunda
declaración que Jesús hizo está registrada en Lucas 23:43. Él dijo a uno de
los ladrones:
43 …De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el
paraíso.
Los ladrones lo habían insultado cuando Él estaba colgado en
la cruz. Aun así, no se ofendió.
“He ahí tu hijo”, “He ahí tu madre”
En Juan 19:26: Jesús dijo: “… ¡Mujer, he ahí tu hijo!” En Juan 19:27: Él
dijo a uno de Sus discípulos: “… ¡He ahí tu madre!” A María le fue dado otro
hijo y al discípulo recibió otra madre. Jesús nombró esto. Él se encargó de
que Su madre y Su amigo se cuidaran.
“¿Por Qué Me Has
Desamparado?”
Ahora, ve a Mateo 27:46. Aquí es donde Jesús fue hecho
pecado por ti, por mí y por todo el mundo:
46 Cerca de la hora
novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: «Elí, Elí, ¿lama sabactani?» (que
significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?»).
Jesús
fue hecho pecado. En el Salmo 22:1, el salmista empieza:
2 Dios mío,
Dios mío, ¿por qué me has desamparado?...
Ese es Jesús, una profecía
de Jesús muriendo en la cruz. Él fue hecho pecado y fue separado de Dios.
El Salmo 22 claramente nos muestra a Jesús en el infierno. En el Salmo
22:22, describe a Jesús resucitado de entre los muertos, Él dijo al Padre:
22 Anunciaré tu nombre a mis hermanos; en medio de la congregación te
alabaré.
Sin embargo, en el verso 1, Él dice: “Dios mío, Dios mío,
¿por qué me has desamparado?”. Él fue desamparado en la cruz. Jesús fue
desamparado desde que Él fue hecho pecado en la cruz hasta que Él fue
resucitado de entre los muertos. Él fue desamparado; Él fue separado del
Padre.
Su Espíritu No Estaba Angustiado (Herido)
La fortaleza
del Espíritu de Jesús es la única cosa que pudo haberlo sostenido en Sus
enfermedades. Sin embargo, Su Espíritu estaba fuerte. Recuerda Proverbios
18:14: “El ánimo del hombre le sostendrá en su enfermedad, pero ¿quién
sostendrá a un ánimo angustiado?”
Su Espíritu no estaba angustiado
(herido). Lo sostuvo. Tú y yo tenemos el mismo Espíritu en nosotros.
Dios está trayendo gente que caminará como lo hicieron Pablo y otros. Ellos
caminaran como Jesús, porque ellos tenían Su Espíritu en ellos y Cristo moró
en ellos ricamente por la fe a través de Su palabra.
Dios está
levantando a Su gente y ellos caminarán en la tierra como Jesús caminó. El
Espíritu de Jesús en ellos los sostendrá de los ataques.
“Tengo Sed”
En Juan 19:28: Jesús dijo: “…Tengo sed”. Entonces, Él recibió el
vinagre. Recuerda, antes Él reusó el vinagre que contenía hiel. Ahora, Él
dijo: “…Tengo sed” y Él recibió el vinagre.
¿Por qué? Estaba
profetizado que ellos le darían vinagre a beber. Él reusó la bebida que
estaba equivocada. Me maravilla el modo en que Jesús se condujo en la cruz.
“¡Consumado es! (¡Está Terminado!)”
En Juan 19:30: Jesús dijo:
“¡Consumado es! (¡está terminado!)” ¿Qué fue lo consumado? Yo solía leer eso
y pensar: “¿Qué es los que quieres decir con consumado es?”
La
respuesta es, que todo lo que se hizo en la cruz por la raza humana o lo que
se va hacer por la raza humana, se consumó (estaba terminado). ¿No es eso
increíble? Jesús había cumplido las escrituras perfectamente y Él había
hecho el trabajo completo por ti y mí.
“En Tus Manos Encomiendo Mi
Espíritu”
La última declaración que Jesús hace, está en Lucas 23:46:
46 …Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Habiendo dicho esto,
expiró.
Él encomienda Su Espíritu al Padre y Él muere.
En Juan
19:32-37: los soldados vinieron. Ellos no rompieron Sus piernas, porque Él
ya estaba muerto. Sin embargo, con una lanza le abrieron el costado. El
profeta Zacarías profetizó que ellos mirarían al que habían traspasado.
La casa de Israel va a ver al Señor Jesús. Ellos verán a quien ellos
traspasaron y volverán a Él y creerán en Él y serán salvos.
Jesús
Terminó el Trabajo
Entonces, en la cruz, Jesús hace estas ocho
declaraciones. Él tenía la fortaleza del Espíritu para poder cumplir
perfectamente el plan de Dios. Él le dijo al Padre: “¡Consumado es! (¡está
terminado!)”. Después que se terminó, Él dijo: “…en tus manos encomiendo mi
espíritu y Él expiró su Espíritu”. Pero Él no murió hasta que terminó el
trabajo.
Ese es el Espíritu en ti y en mí. El Espíritu en nosotros
permitirá que caminemos como Jesús caminó. Nosotros podemos ser guiados por
el Espíritu y siempre obedecer a Dios. Y no tenemos que morir hasta que Dios
dice: “Consumado es (está terminado)”.